El dia que dejamos de pensar I

En los inicios de la política, los puestos eran elegidos de manera democrática y en función de la capacidad demostrada de los candidatos para dar el mejor servicio a la comunidad que representaban en el área que eran asignados. De esta costumbre se desarrolla un sistema diseñado para que cada candidato pudiera presentar unos ideales que habrían de ser seguidos por un grupo de personas que compartían la visión del candidato.

Pasamos de un sistema que privilegiaba al mas apto a uno basado en los ideales y las Corrientes política – económicas que representaban. Hoy tenemos un sistema mucho peor, dejamos de escoger el mas apto o el que tenia las mejores ideas para empezar a dejarnos influenciar de la publicidad y empezamos a oír a muchas amas de casa decir en el 1996: “voy a votar por Leonel porque ese tipo si ta bueno”.

Desde esa campaña electoral se nos quito el derecho a razonar y votar por el mejor y se nos ha limitado a elegir en el mejor de los casos al que tiene mejor publicidad, en el peor de los casos tenemos que elegir al menos malos (oiga usted eso!!!) o votar en contra del que esta (pregúntenle a los que votaron por Leonel queriendo mas bien votar en contra de Hipólito y todos los que están pensando votar contra Leonel votando por Miguel).

Ojala crezcamos, en el futuro cercano, lo suficiente para volver a elegir de forma concienzuda.